Durante estos meses de invierno muchos nos preguntamos si nuestros peludos sienten el frío como nosotros o por el contrario la naturaleza les ha otorgado la capacidad de resistencia a las inclemencias meteorológicas. En esta entrada hablaremos principalmente de los perros ya que al salir diariamente a la calle se encuentran más expuestos a las bajas temperaturas.
¿Realidad o mito?
Lo cierto es que, al igual que ocurre al enfrentarse a las altas temperaturas, la adaptación al frío depende de varios factores:
Especie/raza: Existen razas de perro que se encuentran perfectamente adaptadas a las bajas temperaturas ya que provienen de lugares extremadamente fríos, algunos ejemplos son el Husky, San Bernardo o el Alaska. Existen otras razas, que aunque no provienen de zonas tan frías sí que pueden adaptarse mejor a las bajas temperaturas desarrollando un pelo más denso en esta época del año, entre ellos están los pastores alemanes o los mastines. En el otro extremo de la balanza se ecuentran los perros de pelo corto como los galgos o los doberman que no cuentan ni con protección grasa ni con pelaje denso…estas suelen ser las razas más frioleras.
Tamaño: Proporcionalmente, cuanto más pequeño sea un animal, mayor superficie corporal expuesta al frío tendrá. Es por esta razón que las razas pequeñas tienen menos intolerancia al frío que las grandes.
Edad: Tanto los cachorros como los peludos de edad avanzada son más susceptibles a los cambios de temperatura ya que tienen mayor dificultar para termorregular su organismo. Es con estos animales con lo que tenemos que tener especial cuidado frente a temperaturas demasiado bajas o elevadas y asegurarnos su confort térmico.
Patologías: Aunque no es un factor que influya en la resistencia a las bajas temperaturas, sí que hay determinadas afecciones que influyen en el bienestar del animal o que se relacionan con la exposición al frío. Algunos ejemplos serían:
- Artrosis: degeneración de las articulaciones, muy frecuente en animales senior que empeora la sintomatología y las molestias durante estos meses de invierno.
- Vasculitis en orejas: se trata de una patología inmunomediada que afecta principalmente a las puntas de las orejas más desprotegidas en presencia de frío intenso (aprox. 0ºC)
- Almohadillas sensibles: Es otra de las zonas más expuestas al no encontrarse cubiertas por pelo, las almohadillas en ambientes muy fríos pueden agrietarse y sufrir lesiones molestas.
¿Cómo podemos saber si nuestra mascota tiene frío?
No siempre es fácil reconocer si nuestro perro tiene frío, a continuación hemos hecho una lista con los signos más habituales.
- Rehusa salir a dar un paseo o quiere concluirlo antes de lo habitual
- Buscan rincones cobijados o cerca de fuentes de calor (radiadores o incluso nosotros mismos)
- Se tumban formando un «ovillo»
- Se mueven menos
- Temblores
¿Cómo podemos ayudar a nuestras mascotas a enfrentarte al frío en invierno?
A continuación te ofrecemos algunos consejos para que puedan disfrutar de estos meses de frío:
- Intenta mantener la casa a una temperatura agradable aunque no estés en casa.
- Evita que tus mascotas duerman fuera de casa.
- En los perros de pelo largo evita los cortes de pelo con máquina que les dejen el manto demasiado corto.
- En los días de lluvia, asegúrate de secar a los perretes completamente.
- Durante el invierno, es posible que nuestra mascota necesite mayor aporte de energía, si no tiene sobrepeso puedes ofrecerle una mayor ración de comida.
- Puedes colocar una manta en su cama y acercarla a algún radiador si crees que pueda tener frío en casa.
- Si lo tolera, puedes colocarle un jersey o abriguito antes de salir a dar un paseo.
Si tienes alguna duda…solo tienes que contactar con nosotros!!